Por Redacción:
Ciudad de México; jueves 25 de septiembre de 2025.- El supertifón Ragasa, clasificado como categoría 5, ha sido el ciclón tropical más potente del año, causando devastación en su paso por Asia. Tras azotar Filipinas, Ragasa tocó tierra en Taiwán el 22 de septiembre, donde dejó al menos 17 muertos, 32 heridos y 17 desaparecidos debido a inundaciones catastróficas. En la región de Hualien, el desbordamiento de un lago de retención provocó una avalancha de agua que destruyó viviendas y arrasó infraestructuras. Más de 70 cm de lluvia cayeron en solo dos días, desplazando a miles de personas y causando daños generalizados en la isla.
El tifón continuó su trayectoria hacia el norte de Hong Kong, donde las autoridades emitieron una alerta máxima, cerrando escuelas y negocios, y suspendiendo más de 700 vuelos. Se registraron al menos 90 personas heridas y más de 800 residentes buscaron refugio en albergues temporales. La tormenta también afectó a Macao, donde los casinos fueron cerrados debido a las intensas lluvias y marejadas ciclónicas.
En China continental, Ragasa tocó tierra en Yangjiang, en la provincia de Guangdong, el 24 de septiembre. Las autoridades chinas emitieron una alerta roja por marejadas ciclónicas, previniendo olas de hasta 2.8 metros en algunas zonas costeras. Se ordenó la evacuación de más de 2 millones de personas en la región, incluyendo la megalópolis de Shenzhen, donde se prepararon para evacuar a 400,000 residentes. La tormenta también causó la caída de árboles y daños en infraestructuras urbanas.
Los expertos advierten que el cambio climático podría estar aumentando la frecuencia e intensidad de fenómenos como Ragasa, y que las regiones afectadas deben reforzar sus medidas de preparación y respuesta ante desastres naturales.
Las autoridades continúan con las labores de rescate y asistencia a los afectados, mientras se evalúan los daños y se implementan planes de recuperación en las áreas impactadas.
